La rana verde de ojos rojos (Agalychnis callidryas) es una especie de anfibio que destaca por su aspecto intimidante, especialmente cuando despliega sus vivos colores en respuesta a una amenaza. Su peculiaridad radica en sus ojos rojos brillantes, los cuales se cree que utiliza para asustar a posibles depredadores, como monos, serpientes y lagartos.
Este fascinante anfibio, que habita en las selvas tropicales, pasa el día oculto en la parte inferior de las hojas, camuflándose con el entorno. Sin embargo, cuando se siente amenazado, abre sus grandes ojos rojos y muestra sus patas naranjas, así como los brillantes tonos azules y amarillos de sus costados. Esta estrategia de exhibición de colores le permite intimidar a sus potenciales agresores y ganar tiempo para escapar.
La rana verde de ojos rojos es una criatura arborícola, con patas delanteras bien desarrolladas que presentan dedos terminados en discos adhesivos, adaptados para trepar y aferrarse a las ramas de los árboles. Este hábito la lleva a refugiarse habitualmente en la altura que ofrecen los arbustos y árboles.
Esta especie muestra dimorfismo sexual, siendo las hembras más grandes que los machos. El apareamiento ocurre generalmente alrededor de los tres años de edad, y los machos realizan exhibiciones en las ramas para atraer a las hembras.
Después del apareamiento, la hembra deposita sus huevos en racimos gelatinosos en el envés de las hojas sobre el agua. Tras unas dos semanas, los huevos eclosionan, dando lugar a los renacuajos, que caen uno a uno al agua y completan su metamorfosis en unos 2 o 3 meses, siendo independientes desde el primer momento.
En cuanto a su alimentación, la rana verde de ojos rojos se alimenta principalmente de polillas, moscas, grillos y otros insectos, aunque su dieta puede variar según la ubicación y la época del año. Utiliza su lengua larga y pegajosa para capturar a sus presas, y puede pasar varias horas cada noche alimentándose.