El zorro común o zorro rojo (Vulpes vulpes) es el mamífero carnívoro más abundante del planeta, conocido por su astucia y su naturaleza curiosa e inteligente. Su comportamiento desconfiado y tímido le ayuda a evitar peligros.
Características físicas
Este pequeño cánido se distingue por sus orejas y pies de color negro, y la punta de su cola blanca. Su pelaje es normalmente de un color herrumbroso o castaño rojizo en el dorso y los flancos, mientras que en la parte ventral y la garganta es de un tono blanco grisáceo. Pesa entre 4 y 8 kilos, y su cuerpo alargado parece más grueso debido al espeso pelaje que lo cubre. Sus patas son delgadas y cortas, y su cola es larga y peluda.
Habilidades y comportamiento
El zorro es ágil, veloz y resistente, capaz de realizar diversas acciones: se desliza por espacios estrechos, da grandes saltos, nada muy bien y es un hábil trepador. Al correr, lleva la cola levantada y extendida hacia atrás, mientras que al caminar, la baja hacia el suelo. Cuando acecha, se tiende en el suelo sobre su vientre.
Comportamiento social y caza
Se dice que los zorros pueden matar a sus compañeros heridos, no solo para comérselos sino también para evitarles sufrimientos. Acostumbran a cazar durante la noche, al amanecer o al anochecer. Su dieta es muy variada e incluye ratones y topillos, lo que los convierte en animales útiles para los campos. También cazan liebres, conejos, aves y cervatillos, nadan en lagunas y pantanos en busca de presas acuáticas, y comen insectos, uvas y fruta muy madura.
Fotogenia
Fotográficamente, los zorros tienen unos ojos muy expresivos que rápidamente brillan, haciendo de ellos un sujeto fascinante para los fotógrafos.
El zorro es un animal que combina inteligencia, agilidad y una dieta variada, lo que le permite adaptarse y prosperar en diferentes entornos, manteniendo siempre su fama de astuto y desconfiado.